Señor Cautivo de Ayabaca

Oraciones

Para iniciar la peregrinación en Compañía de María

¡Oh bondadosa Madre, Santa María!
En tu terreno caminar
conociste de los viajes y peregrinaciones,
de sus trajines y hasta de sus peligros.
Protégenos a nosotros, hijos tuyos,
que hemos decidido peregrinar
para encontrarnos con tu Divino Hijo, el Señor Cautivo.
Acompáñanos en todo momento;
vela por nuestro bien y por nuestras necesidades;
has que lleguemos con bien a nuestro destino,
y que guiados por tu amor maternal
podamos hallar a Jesús, el Señor Cautivo,
y ofrecerle el homenaje de nuestra fe y amor.

Amén.

Oración del Peregrino

Señor Cautivo:

Después de haber caminado, peregrino para cumplir mi promesa,
te adoro mi Dios y te doy gracias porque has dado tu vida por mí.
Te agradezco todo el bien que me has hecho.

Yo se que tu gracia me acompaña, y que puedo hablar contigo en cualquier parte;
pero he venido a tu santuario y me siento feliz hablando hoy aquí contigo.
Quiero tocarte, pero más importante, quiero que Tú toques mi corazón
y lo transformes para ser mejor cristiano, y así trabajar con empeño
por construir un mundo más justo y reconciliado.

Que cuando regrese a mi casa, lleve a los míos la paz de haberme encontrado contigo,
y que en mi pueblo sepa compartir la fe y mi alegría con aquellos que no te conocen.
Hoy a tus pies, Señor Jesús Cautivo, prometo con tu ayuda dejar mi pecado,
y vestir el hábito limpio de la santidad, de la verdad y del amor.

Amén.

Bendíceme Señor Cautivo

Señor Cautivo:
Con humildad vengo ante tu presencia.
Que gozo tan grande es estar ante Ti.
Te doy gracias y te alabo por tu Majestad infinita.
Por favor perdóname todos mis pecados.
Señor, vengo ante Ti pobre y humilde.
Quiero alabarte.
Quiero amarte con todo mi corazón, con toda mi mente, con todo mi ser.
Te pido que me levantes ante tu presencia. Que brille tu luz sobre mí.
Permíteme caminar contigo y seguir tus pasos, pues quiero ser como Tú.
Protégeme y bendíceme, oh mi Señor Jesús Cautivo.
Lléname de tu Espíritu.
Concédeme amor, paz y alegría.
Sáname de mis enfermedades y de mis pecados.
Bendíceme y santifícame, oh Señor.
Hazme una bendición para todos aquellos a mí alrededor.

Amén.

Compartir: