Homilías

HOMILÍA SOLEMNIDAD DE NUESTRA SEÑORA DE LAS MERCEDES-MISA Y TE DEUM CON LAS FUERZAS ARMADAS 2011

Señor Licenciado Javier Atkins Lerggios, Presidente Regional de Piura.

Señor Ramón Celi Soto, Gobernador de Piura.

Señora Ruby Rodríguez de Aguilar, Alcaldesa Provincial de Piura.

Señora Violeta Ruesta de Herrera, Alcaldesa de Castilla.

Señor Doctor, Luis Alberto Cevallos Vegas, Presidente de la Corte Superior de Piura.

Señora Doctor, Guillermo Castañeda Otsú, Presidente de la Junta de Fiscales de Piura.

Señor Doctor, César Orrego Azula, Jefe de la Defensoría del Pueblo de Piura.

Señor General de División Ejército Peruano, Walter Martos Ruíz, Comandante General de la Región Militar del Norte y Comandante General del Comando Operacional del Norte.

Señor Contralmirante Armada Peruana, Ricardo Menéndez Calle, Comandante General de la Primera Zona Naval.

Señor Mayor General Fuerza Aérea Peruana, Rodolfo Alejandro Pereyra Cúneo, Comandante General del Ala Aérea Nº 1.

Señor Mayor General Policía Nacional del Perú, Julio Jorge Martínez Maruno, Director de la Primera Dirección Territorial Policial.

Señor General de Brigada Ejército Peruano, Raúl Silva Albán, Segundo Comandante General de la Región Militar del Norte.

Señor General de Brigada Ejército Peruano, Luis Sánchez Born, Jefe de Estado Mayor de la Región Militar del Norte.

Señor General de Brigada Ejército Peruano, José Abel Emmanuel Grados, Inspector General de la Región Militar del Norte.

Dignas Autoridades Políticas, Diplomáticas, Universitarias, Civiles y Militares.

Señoras y Señores.

Nuestra Señora de las Mercedes, Gran Mariscala del Perú

Hoy todo Piura, y de manera particular Paita y nuestras Fuerzas Armadas, rinden homenaje de amor filial a “Nuestra Señora de las Mercedes”, “Patrona de los Campos del Perú y de las Armas de la República”. El 24 de septiembre de 1921, Ella fue coronada canónicamente con ocasión del primer centenario de la Independencia Nacional, como “Gran Mariscala del Perú”, oficializándose este título el 23 de septiembre de 1969, junto con el de “Patrona de las Fuerzas Armadas”. Por ello su imagen ostenta en su mano derecha junto con el santo escapulario, el bastón de Mariscala.

Los peruanos que visten el uniforme de la Patria, la tienen como su Madre y su Reina, y le rinden el día de hoy el homenaje de su devoción y piedad filial. Queremos hoy poner una vez más bajo su protección a todos nuestros soldados, marinos y aviadores, rogándole que los libre de todo peligro y los ayude en todo momento a estar a la altura de su misión, cual es garantizar la independencia, la soberanía y la integridad de la Patria.

Nuestro reconocimiento a quienes siguiendo los sublimes ejemplos de Grau, Bolognesi y Quiñones, se conducen en sus vidas con lealtad al Perú y viven con pasión su carrera militar, la cual existe para servir a la Patria y a sus compatriotas sin distinción alguna, muchas veces hasta el sacrificio de la propia vida, para así conservar intacta la soberanía y la libertad de la Nación.

Hoy queremos rendir particular homenaje a dos nuevos héroes de nuestro Ejército: al Teniente Coronel EP Esneider Vásquez Silva y al Capitán EP Jenner Vidarte Campos, quienes recientemente han entregado sus vidas en el cumplimiento del deber en la Quebrada de Choropampa, localidad del San Martín de Pangoa, Junín, Zona ubicada en el VRAE.

Ellos fueron cobardemente asesinados por la acción criminal de una banda de sicarios rurales del narcotráfico pertenecientes a Sendero Luminoso. Son dos nuevos mártires de nuestro Ejército que vienen a sumarse a la larga lista de miembros de nuestros institutos militares y policiales que han ofrendado sus vidas por el Perú.

En esta Santa Misa elevamos nuestras oraciones por su eterno descanso, expresamos nuestra solidaridad a sus familias y al Ejército del Perú. Su muerte enluta a toda la familia peruana y nos recuerda una vez más el rol imprescindible y decisivo de las Fuerzas Armadas y Policiales en nuestra vida democrática.

La valerosa muerte de estos dos oficiales de nuestro Ejército nos ayuda a comprender la sacrificada tarea que cumple el personal de nuestras Fuerzas Armadas, que es del todo singular y diferente al de los otros sectores de la administración del Estado, pues su misión de estar constantemente preparados para la Defensa Nacional, exige de sus integrantes: riesgo permanente de perder la vida o su integridad física; no tener horario de trabajo; cambios de colocación imprevistos y de cumplimiento obligatorio; alejamiento de la familia; no derecho a la sindicalización ni huelgas y mantener su condición de no deliberantes.

Por todo ello, lo menos que puede hacer el Estado y la sociedad peruana, es reconocer y agradecer el trabajo de nuestras Fuerzas Armadas y Policiales, y expresar este reconocimiento y gratitud con dos acciones muy concretas: primero, asignar de una vez por todas los recursos que necesita el Sector Defensa para garantizar la plena operatividad de las Fuerzas Armadas así como el entrenamiento de su personal para así contar con unas Fuerzas Armadas disuasivas; y segundo dar solución definitiva al problema de las remuneraciones y pensiones del personal militar y policial.

Ruego a la Virgen Santísima, “Nuestra Señora de las Mercedes”, que los proteja siempre en el cumplimiento de sus deberes y que los dones divinos de sabiduría y fortaleza los acompañen en todo momento. Sean soldados, marinos y aviadores íntegros, de conducta intachable y de gran calidad moral.

Para ello tomen a Cristo como su modelo de vida, al Evangelio como su código de conducta, y a María Santísima como vuestra Madre. Porque las virtudes humanas exigidas por vuestra vocación, como son entre otras, el valor, la abnegación, la disciplina, el compañerismo, la honestidad, se encuentran más garantizadas y ennoblecidas cuando la fe, el sentido cristiano del sacrificio y de la fraternidad las ilumina e impregna. Que los aliente el ejemplo de tantos compañeros de ustedes que cumpliendo fielmente con su deber, alcanzaron la cumbre del heroísmo y, a veces, el de la santidad.

El Escudo del Perú y el tajo en el cuello de La Mechita

Es rica la simbología de la imagen de nuestra querida “Mechita”, como tierna y filialmente nos dirigimos los piuranos a nuestra Madre de todas las Mercedes. Quisiera esta mañana detenerme en dos de los rasgos de la imagen. Uno está presente en todas las representaciones de la Virgen de las Mercedes en el Perú y es el Escudo Peruano bordado en su vientre. El otro rasgo, solamente está presente en la imagen que desde hace siglos veneramos en Paita: el tajo en su cuello.

El Escudo Peruano en el vientre de nuestra “Mamita Meche”, nos habla de su maternidad espiritual sobre todos nosotros. María es verdaderamente nuestra Madre, Madre de todos los peruanos y en su advocación de las Mercedes, particularmente de los piuranos y de manera especial de los paiteños.

Ella verdaderamente nos ha llevado en su vientre y nos ha dado a luz a la salvación. Por eso a María se le aplican las palabras del libro del Cantar de los Cantares: “tu vientre es como un cúmulo de trigo, de lirios rodeado” (Ct 7, 3). San Ambrosio, explica esta pasaje del libro sagrado diciendo que si bien en el vientre purísimo de María hubo un sólo grano de trigo, que fue Jesucristo, sin embargo, se dice cúmulo de trigo, montón de trigo, porque en aquel sólo grano de trigo estaban contenidos todos los elegidos, de los que María debía ser la Madre. “En este único fruto, Jesús, único salvador de todos, María dio a luz a muchos para la salvación. Dando a luz a la Vida, dio a luz a muchos para la vida” (San Guillermo, abad).

Signo de su amor maternal por nosotros es que desde hace siglos y con el beneplácito del Señor, se escogió Paita para poner ahí su morada entre nosotros y desde allí ser la Madre buena y amorosa, cercana y acogedora con sus hijos piuranos para prodigarnos sus cuidados maternales.

Por ello miremos con confianza el presente y el futuro. Nuestra Señora de las Mercedes, nuestra amada “Mamita”, nuestra queridísima “Mechita”, realmente nos quiere, nos ama, nos cuida, porque somos verdaderamente sus hijos, hijos de su gran fe. ¡Con Ella todo es más fácil! Afrontemos entonces cada día los retos y desafíos encomendándonos a la Santísima Virgen, sabiendo que contamos con su intercesión y ayuda constantes.

El segundo símbolo al que quiero referirme, es exclusivo de la imagen de Nuestra Señora de las Mercedes de Paita. Es el tajo en su cuello. Cuenta la historia que el 24 de noviembre de 1741, en horas de la noche, una flota pirata de navíos ingleses, comandada por el almirante George Anson, acostumbrados a la destrucción y el pillaje, bombardeó, saqueó e incendió Paita.

Anson quiso completar este cuadro de destrucción saqueando el templo donde se veneraba la imagen de “La Mechita”. El pirata al verla en su camarín con los brazos extendidos demandando paz a los desalmados que así invadían su casa, poseído de furia, se lanzó sobre la sagrada imagen de nuestra Madre descargándole su pesado sable. Más sus esfuerzos para decapitar la imagen de la Virgen fueron vanos ya que su espada se debilitaba y desafilaba a cada golpe, aumentando con ello su ira. Al ver la inutilidad de su intento, irritado, más que admirado, por el milagro que acababa de presenciar, Anson ordenó a sus hombres que trasladaran la efigie de la Virgen a bordo de su buque. Pero apenas llegados con su preciosa carga al navío, el mar, tan apacible de continuo, se embraveció de pronto, poniendo en peligro las embarcaciones piratas. Los tripulantes del buque en el cual se hallaba la Virgen de las Mercedes, sobrecogidos de pánico, la arrojaron al mar, calmándose al instante el furor de las aguas. Al día siguiente muy temprano cuando los buques ya habían levado sus anclas, varios pescadores que caminaban por la orilla, divisaron una figura blanca tendida en la playa. Grande fue su sorpresa cuando vieron que se trataba de la milagrosa imagen de Nuestra Señora de las Mercedes. La imagen de nuestra Madre fue llevada ese día en solemne procesión hasta su templo.

Hasta nuestros días podemos observar en el cuello de Nuestra Señora de las Mercedes de Paita, la sacrílega señal que causara la espada del bárbaro almirante inglés.

Desde ese momento la devoción a Nuestra Señora comenzó a crecer y a desbordar los límites de su Paita querida, para ser hoy amada y venerada por cercanos y lejanos. “La Mechita” es la vencedora de Satanás y de todos sus secuaces, es decir de todos los agentes de iniquidad. Por ello hoy en día en que la seguridad ciudadana es uno de los problemas que más nos afligen, y con preocupación vemos que 31 años después de irrumpir violentamente en el país, el terrorismo demencial y diabólico, hoy en alianza de muerte con el narcotráfico, sigue cobrando vidas valiosas de militares, policías y civiles, volvamos nuestra mirada a la Virgen y pidamos su intercesión y ayuda maternal para vernos libres de todos los males. Vencedora ayer de piratas y corsarios, “La Mechita” nos ayudará hoy en la lucha contra el mal y en la victoria sobre la delincuencia común, el crimen organizado, el narcotráfico y los remanentes del terrorismo.

Todos por “La Mechita”

No quiero concluir estas palabras sin reiterar el día de hoy el llamado que les he dirigido a todos ustedes el pasado domingo 18 de septiembre a través de un “Exhortación Pastoral”, en relación a la campaña que hemos iniciado por la restauración de la Basílica y Santuario de Nuestra Señora de las Mercedes de Paita, la cual necesita de urgentes trabajos de consolidación de sus estructuras y de remozamiento arquitectónico.

Después de serios estudios hechos desde el año 2007 hasta la fecha, contamos hoy con un proyecto que con su realización permitirá dar una solución definitiva a los problemas que hoy aquejan al Santuario de Paita y la Basílica de nuestra Madre recuperará todo su esplendor. El costo del mismo asciende a la suma de aproximadamente S/. 3’000,000 (tres millones de nuevos soles). Por ello quiero convocar a todos, en primer lugar a los fieles cristianos y devotos de Nuestra Señora de las Mercedes de Paita, pero también a las autoridades de la Región y de la Provincia, a los Gobiernos Locales, a las Instituciones y a los Empresarios, a sumarnos a una gran campaña “Pro Fondos Restauración del Santuario y Basílica de Nuestra Señora de las Mercedes de Paita”, y que hemos llamado “Todos por La Mechita”. El trabajo para hacer realidad este anhelo será de largo aliento, por lo que los invito a no ceder al pesimismo y a la desilusión.

De otro lado es lo menos que nosotros sus hijos en la fe podemos y debemos hacer por Ella. ¡Cuántas bendiciones, cuántos favores, cuántas gracias recibidas a lo largo de estos siglos hasta nuestros días por medio de sus manos! ¡Cuántas vidas salvadas de la muerte física y eterna, cuantos pecadores convertidos, cuántas desgracias superadas, gracias a su amor maternal que es inmenso como el Mar de Grau que baña nuestras costas y que Ella bendice desde su Santuario.

Estoy seguro que todos los Piuranos, autoridades y pueblo fiel, nos pondremos de pie para hacer de esta Campaña una maravillosa oportunidad para testimoniar nuestra fe católica y nuestro profundo amor filial a Santa María, “La Mechita”, nuestra querida “Mamita”.

Que la Virgen de la Mercedes ruegue por todos sus hijos de Piura. Bendiga nuestras familias, a nuestros niños, jóvenes, ancianos y pobres. Nos ayude en la realización de nuestros proyectos por lograr un desarrollo integral de nuestra Región; bendiga a nuestras Autoridades y Fuerzas Armadas. Y a todos nos ayude a crecer en la unidad y la fraternidad, ya que todos sin distinción somos sus hijos.

Que así sea. Amén.

San Miguel de Piura, 24 de septiembre de 2011
Solemnidad de Nuestra Señora de las Mercedes

 

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